Así es, Margaret Qualley y Aubrey Plaza están de romance en Honey Don’t!, la nueva película dirigida por Ethan Coen y coescrita junto a su esposa Tricia Cooke. Esta comedia negra, que forma parte de una trilogía temática iniciada con Drive-Away Dolls (2024) es la historia de Honey O’Donahue (interpretada por Margaret Qualley), una detective privada en un pequeño pueblo que investiga una serie de muertes extrañas vinculadas a una misteriosa iglesia liderada por el carismático y enigmático reverendo Drew Devlin (Chris Evans). A lo largo de la investigación, Honey se cruza con MG Falcone (Aubrey Plaza), una oficial de policía con quien desarrolla una relación que combina tensión profesional y atracción personal. El elenco se completa con Charlie Day como un detective local, entre otros actores destacados.
Aunque aún no hay fecha para su llegada a México se espera que llegue a salas nacionales en fechas cercanas al fin de año y será distribuida por Universal Pictures, hasta ahora sabemos que se estrenará en cines de Estados Unidos el 22 de agosto de 2025.
Honey Don’t! combina elementos de comedia negra con intriga y una estética retro, recordando a clásicos del cine noir pero con un enfoque moderno y queer. La película tuvo su estreno mundial en el Festival de Cine de Cannes 2025, donde recibió una ovación de pie de seis minutos y medio, destacando la actuación de Margaret Qualley y la dirección de Ethan Coen. Durante su estreno en el Festival, Margaret Qualley y Aubrey Plaza protagonizaron una escena donde aparentemente Margaret quiso proteger a su co-protagonista del flash de la prensa, lo cual se interpretó como un tocamiento fuera de lugar, otros usuarios en redes aseguran que fue un movimiento calculado para vender la película, aunque hasta el momento no se ha aclarado si se trata de contenido modificado con IA.
La crítica ha señalado que la película mantiene el estilo distintivo de Coen, con diálogos agudos, personajes excéntricos y situaciones absurdas, todo ello enmarcado en una narrativa que explora temas de identidad y poder. La química entre Qualley y Plaza ha sido especialmente elogiada, aportando profundidad emocional a la trama.
