La industria del skin care está en constante movimiento, y aunque hay ingredientes que van y vienen, hay algunos que han llegado para quedarse gracias a sus múltiples beneficios para la piel. Uno de estos ingredientes es la vitamina C, pero para probar sus beneficios no tendrás que ir por un limón o algún otro cítrico y pasarlo por tu cara, ya que hoy en día existen muchas formas de incluirla en tu rutina de belleza. No es secreto que las mujeres de 60 y más encontrarán en las cremas con vitamina C un aliado para reforzar las células de la piel y así tener un cutis revitalizado, y aquí te damos más detalles.
La vitamina C es un ingrediente ácido, eso significa que al aplicarla sobre la piel retira células muertas y la deja suave y con más luz. También es un antioxidante que neutraliza los radicales libres, ayudando a agilizar el proceso natural de regeneración de la piel. Las cremas con vitamina C ayudan a acelerar el proceso de producción de colágeno y elastina, aportando mayor firmeza a la piel y por lo tanto, haciéndola lucir más joven. Además, si tu piel es propensa a tener manchas o hiperpigmentación, esta vitamina lo evita ya que inhibe la producción de melanina.