En el marco del Salone del Mobile en Milan, Dior abrió una Pop Up con toda la magia que persigue su historia. Del 9 al 14 de abril, Dior abrió una Pop Up temporal en Antonia, Milán conformada por una selección de accesorios pertenecientes a su colección Ready-To-Wear y Primavera-Verano 2019. Como un homenaje a los experimentos de vanguardia de la bailarina Loïe Fuller, una de las musas de la directora creativa de la maison, Maria Grazia Chiuri, en las ventanas del espacio se encontraban algunas impresiones caleidoscópicas que comprendían el diseño interior.
En cuanto a la oferta de la Pop Up, se presentó una bolsa exclusiva de cinturón inspirada en la clásica Saddle tapizada del característico Dior Oblique con una notable variación, un accesorio icónico en cuero o denim adornado con motivos de teñido anudado y se mostró junto a Dior Book Tote. Además de las lámparas inalámbricas Corolle del diseñador francés Noé Duchaufour-Lawrance, disponibles por pedido especial y en una edición limitada en delicados tonos ámbar y rosa. A la inauguración, asistió Maria Grazia Chiuri, quien fue testigo de dos actuaciones especiales inspiradas en el ballet Nuit Blanche, un homenaje al compositor Philip Glass que se realizó en el Teatro dell’Opera de Roma del 29 de marzo al 2 de abril.
Dichas actuaciones contaron con la presencia de Eleonora Abbagnato, la Directora de Ballet en el Teatro dell’Opera de Roma y una Étoile en la Ópera Nacional de París, así como dos parejas más.
Para la primera puesta en escena, los bailarines usaron trajes especialmente diseñados por el Director Artístico; mientras que en el segundo, se pusieron looks de la colección Primavera-Verano 2019 de la casa francesa.