El street style siempre ha funcionado como el espejo más inmediato de lo que realmente se lleva en la moda, y en la edición 2025 de la New York Fashion Week hubo un detalle que nadie pudo ignorar, el regreso triunfal del pelo platinado. Un tono radical que, lejos de pasar desapercibido, se convirtió en un verdadero statement en las calles de Manhattan.
En los alrededores de los desfiles, entre fotógrafos y asistentes, el rubio más helado volvió a marcar territorio. Desde cortes bob minimalistas hasta melenas largas con ondas naturales, el platinado apareció en todas sus variantes, proyectando una energía que oscila entre lo sofisticado y lo futurista. Es un color que exige disciplina y cuidado, pero precisamente por eso se vuelve aspiracional, ya que, quien lo lleva sabe que implica tiempo, constancia y un compromiso con la estética.
Lo fascinante del platinado en este contexto urbano es cómo se adapta al vestuario cotidiano sin perder fuerza. Algunas asistentes lo combinaron con looks monocromáticos en negro, donde el contraste hacía brillar aún más el cabello; otras lo acompañaron con piezas de colores vibrantes que realzaban la frialdad del tono. Incluso en estilismos más relajados —jeans, sneakers y chaquetas oversize—, el platinado funcionó como el accesorio definitivo que transformaba por completo la percepción del look.
El fenómeno también reveló un giro generacional, pues, mientras que antes este tono estaba asociado a una estética de rebeldía juvenil, ahora se percibe como un gesto de refinamiento. No es casualidad que figuras del front row, influencers y creadoras digitales lo adoptaran para diferenciarse del mar de cabellos castaños y rubios cálidos que dominan habitualmente la escena. El mensaje es contundente, en 2025, quien quiere destacar en el street style opta por el platinado y hace frente a la propuesta Mocca Mouse como color del año.
Por supuesto, lograrlo no es tarea sencilla. Este tono implica procesos de decoloración que deben ser realizados con precisión, además de tratamientos de mantenimiento para conservar el brillo frío y evitar el quiebre. Los estilistas insisten en la importancia de productos con pigmento violeta, aceites reparadores y visitas frecuentes al salón. Pero es precisamente esa dificultad la que eleva al platinado como un símbolo de exclusividad, y es que sinceramente no cualquiera se atreve ni cualquiera lo puede sostener.
Más allá de lo técnico, el pelo platinado en el street style neoyorquino se percibe como una herramienta de empoderamiento. Al iluminar el rostro y acentuar los rasgos, genera una presencia magnética que transforma incluso los conjuntos más simples en declaraciones de estilo. Esa cualidad camaleónica —que puede ser etérea, imponente o provocadora según el styling— explica por qué tantas asistentes lo eligieron como aliado para enfrentar el ojo crítico de las cámaras.
El regreso del pelo platinado al street style de la New York Fashion Week 2025 es prueba de que el cabello sigue siendo uno de los lenguajes más poderosos de la moda. No se trata solo de color, sino de actitud. Y en esta temporada, la más audaz se escribe en tonos helados.