Nuestra lista con las lecciones más grandes y útiles
1. Fashion Week no siempre es tan glamurosa como parece. Antes de tomar una posición en la industria, Fashion Week es una fantasía ilustrada que parece casi como una experiencia mágica en el mundo. En el momento lo es, pero realmente es mucho trabajo. No esperes que en tu primer trabajo, te manden a fiestas glamurosas, que te tomen fotos en las calles o que te pongan en front row - hay mucho pasando en lo que es el tras bambalinas, que necesita ser realizado, y realmente son varias horas que necesitan ser invertidas. Tu nunca te imaginas ser de esas personas que se quejan de los shows - pero vas a ver que esa perspectiva cambia pronto.
2. También, Fashion Week es un mes. El caos (y la emoción) no dura solamente una semana en Nueva York - también tienes que pasar por Londres, Milán y París.
3. Tu actitud es tan importante como tus zapatos. Como unos buenos zapatos, una buena actitud es necesaria en todo momento. Sonríe incluso cuando las tareas más mundanas se presenten, ya que cada detalle cuenta.
4. Trabaja con lo que tienes. Puede ser intimidante vestirse para una oficina donde todos lucen piezas de Gucci o de Alexander Wang. Ya que la mayoría de nosotros, no podemos acceder a piezas de diseñador por tener un sueldo de primer año, algunas veces Zara puede ser tu mejor opción. El poder está en cómo lo estilizas. (Todavía nos morimos un poco por dentro cuando vemos una bolsa Chanel pasar, pero recuerda que las cosas buenas toman tiempo).
5. Escucha y practica el arte del networking. Puedes aprender algo de cada persona, desde tus compañeros en la oficina hasta quiénes conoces en los eventos. Habla con todos y escucha a lo que tienen que decir. La industria de la moda puede parecer enorme pero realmente es muy pequeña - no sabes a quien puedes llegar a conocer.
6. Es muy fácil gastarte tu quincena o tu mensualidad. Es mucho más fácil de lo que parece. Después de todo, irte de compras es realmente la parte técnica de tu trabajo, pero aprender a medir es la clave (es todavía un proceso en crecimiento).
7. Existe una pequeña verdad en The Devil Wears Prada. Este hecho es cierto para cada industria. Siempre va a haber una Miranda Priestley. Ignora y crece sobre los conflictos y demás, ya que esta es tu carrera. Demuestra que no es una escena de Mean Girls.
8. La moda nunca duerme. No existe tal cosa como un horario de 9 a 5, porque en cualquier momento, puede salir una noticia, desde un instante en Instagram hasta un tweet cortesía de Kanye West. Estas notificaciones siempre tienen que ser reportadas.
9. La importancia del social media. Tu eres tu propia marca. Utiliza Twitter, Instagram, Snapchat, Pinterest y cualquier otro portal que pueda ser a beneficio o a ventaja propia.
10. Pórtate normal entre modelos y celebridades. Si trabajas en esta industria, te vas a encontrar varias veces entre socialités y celebridades del momento. Pero manténte relajado y profesional (sin explotar cuando veas a tu más grande ídolo).
11. La importancia de desconectarte. Mientras que el hecho de estar pendiente siempre es importante, es normal que desarrolles una seria ansiedad si no te desconectas. No es necesario estar respondiendo mails de trabajo a las 10 de la noche. Respira cuando lo necesites.
12. Quiérete y aprecia tu verdadero ser. Esto es de lo que la moda se trata. No tienes que esconderte detrás de un traje de trabajo. Muestra tu personalidad y vas a ver como podrás brillar más y lograr mejores relaciones con quienes te rodean.
13. Fíngelo hasta que lo logres... Especialmente cuando todos fracasen.