La actriz se avergüenza del sexismo en Hollywood.
Charlize Theron, nunca ha dudado en sacrificar su físico con tal de darle mucho más realismo a sus personajes.
En esta ocasión, lo volvió a hacer para su papel en Trully, su nuevo proyecto. Parece que esta metamorfosis exigida para la comedia estadounidense es una de las más desafiantes hasta la fecha.
En una entrevista para la revista Variety, la activista sudafricana confesó lo difícil que fue subir 16 kilos para su papel como mamá de tres hijos y que fue mucho más complicado que la preparación para su papel en Monster, película que protagonizó 13 años atrás.
“Fue brutal en todos los sentidos. Esta vez realmente afectó a mi salud. El azúcar me sumió en una depresión masiva. Le hablé a mi médico y le dije: '¡Creo que me estoy muriendo!’ A lo que él respondió: ‘No, tienes 41 años. Tranquilízate. No podía perder el peso que había ganado '", declaró.
La intérprete también confesó sentirse avergonzada de ser parte de una industria en la que el sexismo es evidente.