Esta semana, Chrissy Teigen documentó cómo se inyecta Botox en las axilas a través de Instagram Stories. “Me puse Botox en las axilas. Realmente es lo mejor que he hecho”, escribió en el video de su experiencia. “Puedo usar seda nuevamente sin dejar marca”, agregó la modelo y presentadora. Este procedimiento se usa comúnmente para tratar la hiperhidrosis, más comúnmente conocida como sudoración excesiva, que se dice que afecta a 7,5 millones de personas en todo el mundo. Falta ver si el número aumentará, pero ha habido un aumento del 32% en las búsquedas de Google de “sudoración excesiva” en 2019.
Inyecciones de Botox para hiperhidrosis
El esteticista Dr. Esho, que tiene clínicas en Londres, Newcastle y Dubai, explica: “Normalmente, su sistema nervioso activa las glándulas sudoríparas cuando aumenta la temperatura corporal, y así es como su cuerpo se enfría automáticamente. Sin embargo, en personas con hiperhidrosis nervios que indican que las glándulas sudoríparas son hiperactivas”. El Botox trata la hiperhidrosis al bloquear los nervios responsables de activar las glándulas sudoríparas. Lee también: ¿Botox? El Palacio de Kensington responde a los rumores sobre Kate Middleton “Cuando recibes inyecciones de Botox directamente en el área del cuerpo que comúnmente sudas, tus nervios hiperactivos están esencialmente paralizados. Cuando tus nervios no pueden enviar señales a sus glándulas sudoríparas, no sudas”. El Botox solo evita la sudoración en el área específica en la que se inyecta, por lo tanto, utilizado de esta manera, el procedimiento también se puede realizar en las manos y los pies. “Los estudios han encontrado que el Botox trata con éxito las palmas sudorosas en 80 a 90 por ciento de los casos”, señala el Dr. Esho. “Sin embargo, los tratamientos no duran tanto como lo hace con el área de la axila, que puede durar al menos unos seis meses. Los estudios también muestran que el Botox trabaja para tratar el sudor de la frente. Puede reducir la sudoración en un 75 por ciento durante aproximadamente cinco meses”, confirma el médico. El Dr. David Eccleston, director clínico de MediZen en Birmingham, que tiene más de 20 años de experiencia en el manejo de la sudoración de las axilas, asegura que usar Botox de esta manera es “extremadamente seguro cuando lo realiza un médico calificado”. Explica que “la dosis utilizada es muy baja y el Botox se absorbe rápidamente en las terminaciones nerviosas después de la inyección, por lo que no se propaga a otras áreas”. Con información de Harper’s Bazaar UK
