2. Masca chicle en una situación de tensión.
Liberar energía cuando estamos bajo presión es la mejor forma de calmar los nervios, así que cualquier forma de movimiento físico hará que de inmediato tu mente comience a apaciguarse. Si estás en una junta de trabajo o frente a tu escritorio con una cantidad abrumadora de pendientes, lo mejor es tomar unos minutos y mascar un chicle, concentrándote en cada movimiento que hace tu boca. En menos de lo que piensas podrás regresar a tus tareas y terminarlas de forma óptima y tranquila. </p>
3. Calma el enojo del otro al sentarte junto a esa persona.
Estudios han demostrado que tendemos a ser menos agresivos con las personas que están muy cerca de nosotros (aunque no lo creas). Así que cuando sientas que tu jefe o colega están enfurecido por alguna razón contigo, siéntate junto a él o ella, en silencio, y verás cómo la situación se aligera. </p>
4. Pon en práctica el método u201caprender-hacer-enseñaru201d.
Cuando entras a un nuevo trabajo, lo más probable es que sientas que no podrás aprender todo lo que te están diciendo, pero calma, hay una solución. Según expertos, la mejor manera para lidiar con esta presión es poner atención a lo que dicen tus superiores, ponerlo en práctica lo más rápido que puedas, sin miedo a equivocarte, y finalmente, si lo enseñas a alguien más, también estarás practicando y podrás sentirte bien al ayudar al prójimo.</p>
5. u201cTransformau201d el miércoles en algo más que la mitad de la semana.
Estudios indican que el miércoles, es el día en el cual el ánimo de las personas cae, y sólo es tomado como un día de u201crellenou201d para llegar al fin de semana. Para cambiar este sentir, haz planes que te motiven los miércoles, como clases de baile, canto o para aprender un idioma nuevo, una rutina de ejercicio, o incluso una reunión semanal con tus amigos, padres o hermanos. De esta forma, tendrás un u201cdestinou201d al cual llegar cada semana. </p>
fuente: Instagram