Balayage, contour, strobing y green beauty fueron algunas de las tendencias en tratamientos y maquillaje que transformaron nuestra percepción de la belleza a lo largo de la década.
1 Alta definición
No podemos hablar del Contour, que –además de definir las caras de quien la aplican– definió una década, sin omitir a Kim Kardashian (una de sus principales propulsoras). Esta técnica, a partir de un estratégico juego de luces y sombras, ha hecho magia, afinado narices, reducido mejillas y hasta adelgazado rostros.
2 Amplitud de marco
https://www.instagram.com/p/B5S76LzF2U4/?utm_source=ig_web_copy_link Si en los 80, Brooke Shields fue famosa por dejar sus cejas en libertad. En esta década será reconocida Cara Delevingne y el imponente marco de sus ojos. Para definirlas, recortarlas, iluminarlas, rellenarlas y hasta peinarlas se generó una nueva e inmensa categoría de maquillaje y tratamientos.
3 Degradé
Durante esta década, no había reunión o evento en el que no hubiera una invitada con mechas en tonos más claros; ni salón que no presumiera ofrecer la mejor técnica de aplicación de Balayage. Ahora, las variantes de esta técnica de coloración propone mechas en colores de fantasía degradados.
4 Del lejano oriente
Históricamente, la piel de las coreanas ha sido apreciada por su apariencia de porcelana; pero, más allá de la genética, también influía una fuerte cultura en materia de nutrición cosmética. Con The Little Book of Skin Care: Korean Beauty Secrets for Healthy, Glowing Skin, escrito Charlotte Cho, salieron a la luz impactantes revelaciones en materia de ingredientes (Baba de caracol); presentaciones (sheet masks o cushions), nuevos productos (BB creams) y procesos de cuidados (doble limpieza).
5 Reality bites
Por décadas, el french imperó en materia de manicure; hasta esta década, cuando se multiplicaron los salones especializados solamente en uñas: con aplicaciones, de gel o, con los esmaltes tradicionales, pero con mucha atención en el contraste de colores y efectos gráficos.
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6 Skin first
https://www.instagram.com/p/B5dM1tnnNir/?utm_source=ig_web_copy_link Gracias a las coreanas descubrimos que la base de cualquier maquillaje de impacto es una piel luminosa y sana. Y así, la balanza entre tratamientos y cosméticos se fue inclinando hacia cuidar la piel. Por vez primera nos interesamos en adquirir herramientas especiales como limpiadores sónicos, devices de masaje e incluso esponjas para aplicar la base (las famosísimas y cotizadísimas Beauty Blenders). La tecnología aportó grandes desarrollos para crear gadgets innovadores que trabajan con luces o pulsasiones.
7 Green beauty
https://www.instagram.com/p/B5tiUG2pvgG/?utm_source=ig_web_copy_link Como parte de un sano interés por los ingredientes activos de los productos, surgió un aumento en la búsqueda de certificaciones orgánicas, cuáles son los mejores super foods para la piel y cómo aprovecharlos mejor (a través de recetas caseras, DIY). Esto cobijado por las corrientes internacionales de Wellness, Green Culture Y Cero Waste.
8 Healthy Glow
Mientras el Contouring se centraba en definir la cara a través de maquillaje oscuro, el Strobing buscaba resaltar las facciones con luz, a través de deslumbrantes iluminadores con brillantes pigmentos. Y no sólo eso, como parte de la tendencia que ponía el cuidado de la piel primero, lograr un brillo natural sano (sin necesidad de makeup) se convirtió en el más grande lujo.
9 Pasión matte
La gama de colores de una década siempre tiene al tono rojo entre los primeros lugares; pero esta década, el clásico carmesí tuvo mucha competencia, primero por los tonos nude (cálidas y suaves versiones de café y rosa) y en segundo, por los acabados matte.
10 ¿Con o sin?
Mientras que, a principios de la década, hubo un boom por los centros de depilación (láser, con cera o luz pulsada), a final de ésta hubo movimientos que apoyaban la belleza más natural (o ni tanto, llenando de color el vello de las axilas). Sea tu elección, el vello corporal estuvo al centro del debate.
