El maquillaje de lujo se ha convertido en un territorio de experimentación cultural. Más allá de embellecer, estas piezas condensan el savoir-faire de cada maison: pigmentos diseñados con ingeniería de color, envases que se conciben como objetos de colección y un relato de marca que dialoga con la moda y el arte. Con la llegada de La Beauté Louis Vuitton, el sector suma un actor que traslada el lenguaje de sus icónicos baúles y su marroquinería al terreno de la cosmética.
Hoy en Harper’s Bazaar te presentamos los 5 cosméticos de lujo que realmente valen la pena.
Louis Vuitton y el debut de La Beauté
La maison francesa presenta por primera vez una colección de maquillaje en colaboración con Pat McGrath, figura clave en la industria. El lanzamiento incluye 55 tonos de labial, divididos entre mates y satinados, diseñados para diferentes tonos de piel y concebidos como auténticos íconos portátiles.
Cada lipstick está concebido como un objeto de arte: carcasa lacada en negro con detalles dorados, cierre magnético y la posibilidad de recarga, un guiño a la sostenibilidad dentro del universo del lujo. A ellos se suman bálsamos tintados con aroma a frambuesa o menta, así como paletas de sombras en cuartetos que combinan acabados mates, satinados y brillantes. Todo coronado por accesorios de cuero Monogram que transforman un simple estuche en pieza de colección.
Guerlain, la herencia francesa que nunca pasa de moda
Los polvos Terracotta de Guerlain son más que un producto, son parte de la memoria colectiva del maquillaje de lujo. Con décadas de historia, su fórmula ligera y modulable continúa marcando tendencia, ofreciendo un bronceado luminoso sin excesos. Su atractivo reside en la consistencia de un clásico que se mantiene vigente frente a un mercado en constante cambio.
Hermès Beauty, la artesanía llevada al rostro
La línea de belleza de Hermès traduce el savoir-faire de la marroquinería y la seda en cosméticos minimalistas, diseñados como pequeños objetos de colección. Sus barras de labios destacan por el equilibrio entre color, textura y un envase intercambiable que celebra la durabilidad y el diseño.
Tom Ford Beauty, teatralidad con precisión
Las sombras de ojos y labiales de Tom Ford combinan teatralidad cromática con fórmulas que se aplican con suavidad impecable. Sus estuches, en negro y dorado, evocan el glam contemporáneo, mientras que cada producto se percibe como un statement de sofisticación.
Chanel Les Beiges, frescura elevada a lujo
La línea Les Beiges de Chanel representa la cara más natural de la maison. Polvos iluminadores, bases ligeras y rubores que realzan la piel sin enmascararla. Es la apuesta por un lujo discreto, que privilegia la frescura y la elegancia cotidiana sobre lo excesivo.