Buenas noticias para Harry y Meghan (y Canadá)

Untitled46.jpg
La ultramediática llegada del príncipe Harry y su esposa Meghan a Vancouver tiene eufóricos a los monárquicos canadienses e inyecta esperanzas de mejorar las ventas entre comerciantes de esta urbe enclavada en la costa del Pacífico. Raymond Greenwood, quien se declara monárquico convencido, no dudó en izar en su vivienda el estandarte real, para dar la bienvenida a la mediática pareja. Aunque con carácter más bien simbólico, la reina Isabel II es la jefa de Estado de Canadá, gobernado por una monarquía parlamentaria.
Lee: Las dificultades del nuevo hogar de Meghan y Harry

“Estoy muy, muy feliz”, dijo Raymond, presidente de un club local y quien trabaja como voluntario en el sector del turismo. “Quién no querría tener la oportunidad de encontrarse con Meghan paseando a sus perros en el vecindario”, agregó Raymond, sugiriendo en broma que podría establecer una cabina para vender souvenirs alusivos a la corona.

1178583899.jpg

Foto: Pool/Samir Hussein/WireImage

Visión de negocio

Bruce Hallsor, quien dirige el capítulo local de la Liga Monárquica Internacional -una organización que promueve las bondades del sistema monárquico de gobierno-, aspira reunirse con el duque y la duquesa de Sussex en cualquier evento social. “Egoístamente, esperamos que incluso si el príncipe Harry y Meghan reducen sus compromisos oficiales, al menos quedarán algunos para nosotros”, dijo a AFP. “Sería una ventaja para nosotros”, agregó, rechazando las críticas de quienes arremeten contra la pareja por haber renegado de sus obligaciones relacionadas con la corona. En general los residentes de Vancouver, una ciudad de unos 600 mil habitantes, se han manifestado contentos con los nuevos vecinos al ser consultados por AFP. Algunos esperan sacar réditos de la presencia de la pareja, que vive en una lujosa casa en el norte de Saanich, en las afueras de Victoria.

945600680.jpg

La mejor amiga de Meghan:

Hogar, “nuevo” hogar

Las ventas de la bandera británica y otros emblemas reales han crecido, de acuerdo con Susan Braverman, la gerenta de una tienda de souvenirs en Vancouver. Y, como otros nuevos vecinos de la pareja, ella no los juzga por su decisión de emanciparse. “Todos queremos ver a nuestros hijos crecer y hacerse independientes, ¿cierto? Están despegando”, dijo. Sin embargo, queda por ver dónde se instalarán definitivamente Harry, Meghan y su hijo, Archie. Toronto, la capital económica del país, también tiene algunas ventajas: vive una de las mejores amigas de la duquesa, Jessica Mulroney, casada con el hijo de un ex primer ministro canadiense. Por su parte, Edward Wang, un abogado de Vancouver y aficionado a las interpretaciones sobre la realeza, advierte contra las trampas políticas que podrían esperar a Harry y Meghan en sus declaraciones públicas. La pareja está a favor de la lucha contra el cambio climático, en lo que evidentemente coincide con buena parte de los canadienses, pero corre el riesgo de chocar con los defensores de la industria petrolera en un país que se encuentra entre los principales productores de hidrocarburos.

TAMBIÉN TE VA A GUSTAR
Lo que la reina Letizia, la reina Máxima y Amalia de Holanda usaron en su encuentro.
¿Qué pasó con la princesa Martha de Noruega? Y su próxima boda a detalle.