Prendas especiales que al verlas nos recuerdan un momento que tenemos en el corazón y la mente, ¿a quién no le ha pasado? La primera vez que recorriste París sola, el primer día de Universidad, el día que conociste a tu chico especial, la entrevista del trabajo de tus sueños o tu fiesta de 21 años, momentos que por más que pase el tiempo es imposible olvidar y que tienen en común un detalle: recuerdas perfectamente el look (o por lo menos una parte de él) que tenías puesto en ese instante. Una denim jacket, midi skirt, un vestido floreado, aquellas botas vaqueras (que ya no son tu estilo pero que amaste en una temporada) o ese LBD que hace mucho no te pones pero aún conservas, los sneakers blancos rotos... lo cierto es que sea un look completo o una prenda en específico, cuando es momento de arreglar nuestro armario, todos los recuerdos especiales llegan y de la manera más significativa. Y es que, ¿a quién no le ha pasado? Aunque resulte para algunas personas extraño o incluso superficial, lo cierto es que para ocasiones significativas escogemos nuestro look favorito, pero eso ¿es casualidad? no realmente, va más allá, y es que asociar nuestra ropa a los recuerdos es algo que hacemos inconscientemente porque queremos conservar ese momento en nuestra esencia. En este punto, no solo hablamos de nuestra experiencia, sino que va más allá, pues tomando en cuenta lo complejo que es nuestro cerebro, resulta que investigadores y psicólogos como Frederick Bartlett han dicho que los seres humanos recuerdan momentos mediante una impresión general con algunos detalles, ya sea los olores, sensaciones, sabores o en este caso elementos visuales: prendas. Siendo este último el más interesante y en el que nos enfocamos, ¿por qué? Como decía el filósofo Roland Barthes la moda es un sistema de significaciones, tan complejo que tenemos que analizarlo... transmite mucho más que un diseño y un color, en este caso, momentos memorables. Es así como recordar la ropa que usamos en determinada circunstancia, está ligado al tipo de memoria emocional, la forma en cómo nos hizo sentir lo ocurrido ayuda a fijar el recuerdo y sus detalles, y las emociones también intervienen en que podamos recordar qué prenda llevábamos en esos momentos (y no específicamente por fotografías).
Taylor Swift decía en una de sus canciones: “You’re still all over me like a wine stained dress I can’t wear anymore”. Y después de todo lo anterior es probable que la próxima ocasión que ordenes tu armario sepas porqué no te puedes deshacer de aquel vestido de flores que compraste hace años (y no es exactamente porque aún te queda). Sin duda, es increíble el significado e impacto que la moda puede tener en nuestra vida. La razón primordial por la que la amamos.
